Cuando nos convencemos de que las únicas dos maneras de ganar dinero en los Mercados Financieros son: ser un Trader/Inversionista Profesional ó ir de la mano de uno de ellos, y elegimos el primer camino, es evidente que todos queremos hacer las cosas bien. Y de hecho, lo intentamos.
Pero cuando entramos en acción, nos damos cuenta de que hacemos cosas que nos alejan de un óptimo rendimiento como traders. Pero lo que a veces no sabemos es que, debajo de estas acciones, hay actitudes emocionales subyacentes. Cuando las hacemos, pensamos que estamos haciendo lo mejor pero nos damos cuenta de que no es así. Entonces decidimos no volverlo a hacer, pero aún lo seguimos haciendo. Y se repite, una y otra vez.
Estas son las 5 actitudes humanas que causan los mayores errores de los inversores y traders:
*Imprudencia: Es devastadora de por sí, pero en la inversión lo es más. Tomar posiciones demasiado grandes, no respetar los niveles de Stop Loss, sumar posiciones a una ya perdedora, entre muchos otros. Las personas que caen en imprudencias, por lo general, han perdido la noción de la inversión por un deseo de ganar incontrolable o simplemente, buscan que su inversión sea exitante. Pero lo seguimos diciendo: si busca adrenalina, es más barato ir a un parque de juegos extremos. “Las pasiones hacen vivir a un hombre, pero solo la prudencia lo hace perdurar”- Chamfort.
*Perfeccionismo: Es un fantasma que asoma luego de cada operación. A todos los que nos gusta la excelencia nos sentimos frecuentemente tentados a caer en el perfeccionismo. Pero la inversión no es un juego de exactitudes, sino de aproximaciones. Si bien es cierto que, necesitamos ser excelentes, el buscar el perfeccionismo nos puede sacar del juego y llevarnos a lidiar con problemas internos de autoaceptación. “Todo lo que puedes hacer es todo lo que puedes hacer, pero todo lo que puedes hacer es suficiente!” -A.L. Williams.
*Orgullo: “Todo el que se humilla será enaltecido y todo el que se enaltece será humillado”. Y pareciera que los mercados financieros se encargan de pulir cualquier rasgo de orgullo en nuestra personalidad. Cuando comenzamos a ver buenos resultados, comienza el Ego a engrandecerse más y más, como un globo, hasta que el aguafiestas mercado llega con su querido alfiler… ¡Crash! Tal vez te suene familiar. Sí tenemos que ser confiadamente optimistas pero sin caer en el orgullo. Una clave para vencerlo es nunca pretender ser mejor que otros, sino solamente mejor que nosotros mismos cada vez. “Hay una fina línea entre la arrogancia y la auto-confianza… Arrogancia es una asesina.” -Jack Welch.
*Ira: Vemos una gran oportunidad, nuestros sistemas nos dicen que es hora de comprar… compramos y la acción comienza a subir… sonreímos… pero… ¡el mercado da un giro inesperado y la acción se va a pique! ¡nuestra gran operación resulta siendo un desastre! Entonces, con ganas de revancha, entramos nuevamente al mercado con una posición el doble de grande… y… ya sabes qué sigue!! Lo mejor que podemos hacer es no tomarnos las cosas personales; es decir, si una operación perdedora no es más que eso, a no ser que nosotros le demos mayor importancia. Las cosas no siempre saldrán como lo esperamos y en la medida que lo aceptemos, sabremos controlar nuestra ira. “La ira es una corta locura.”- Horacio.
*Impaciencia: Es el ingrediente final que hace a una persona propenso a caer en una estafa. El ser humano tiende a quererlo todo ya, y no es necesario que te guste esperar, pues a nadie le gusta, pero sí necesitas aprender a esperar pues en la inversión lo vas a necesitar. La impaciencia hace que un inversor se salga de su plan inicial de inversión. Necesitamos paciencia para esperar que una posición llegue a su objetivo, para que desarrollemos nuestro plan y sobre todo, para que empecemos a ver las jugosas ganancias engrosar nuestras cuentas. Recuerda que “el tiempo es el mejor amigo de los buenos negocios y enemigo de los mediocres.” -Warren Buffett.
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